Mi madre enfrentaba dificultades para moverse debido a dolores articulares y de rodilla, pero todo cambió al probar este jugo natural, despidiéndose de las molestias articulares.
Sean todos bienvenidos.
Empezaremos con una banana, la cual pelaremos y cortaremos en rodajas.
La banana, conocida así en varias regiones, es excelente contra la artritis gracias a sus propiedades antiinflamatorias dadas por la vitamina B6, la cual alivia naturalmente la inflamación articular.
Necesitaremos también una cebolla pequeña, la cual pelaremos y cortaremos en trozos finos.
A medida que envejecemos es común sentir dolor y rigidez en las articulaciones debido al desgaste.
La cebolla es clave para mantener la salud ósea y contribuye a la prevención de afecciones cardiovasculares al reducir el colesterol.
Incorporaremos igualmente una cucharada de cúrcuma en polvo.
La cúrcuma no solo fortalece los huesos gracias al calcio, sino que también apoya la contracción muscular, funciones nerviosas y la coagulación de la sangre de forma eficiente.
Conocidos los beneficios, combinamos todos los ingredientes en la licuadora.
Añadimos medio litro de agua y licuamos durante unos 3 min.
Una vez mezclado, filtramos el contenido a través de un colador en un recipiente, utilizando una cuchara para extraer todo el líquido, descartando la fibra restante.
Y así tenemos listo nuestro jugo para reforzar la salud ósea.
Se sugiere consumirlo diariamente entre uno a dos vasos durante una semana.
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